lunes, 9 de diciembre de 2013

100 entradas!!!

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100 entradas precisamente hoy, cuando voy recuperando muy poco a poco la costumbrre de escribir. Bueno, sea como fuere, buena noticia haber llegado hasta aquí!!

Humanismo Vs Animalismo

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No soy una persona ajena a la empatía con el reino animal, desde muy pequeño fui muy sensible a esa conexión tan sencilla de establecer con los animales y que a veces tan difícil es de establecer con nuestros semejantes. De hecho, creo que aún teniendo una capacidad innata, la empatía con la humanidad ha sido algo que he tenido que trabajar y sigo trabajando hoy en día con gran esfuerzo. Hasta aquí mis antecedentes. 

Digo todo esto porque veo que en muchas ocasiones la empatía animal se alza como una gran virtud a base de rechazar, o en contraposición, de la empatía humana. Algo que puede resumirse claramente en esta frase que he oído con excesiva asiduidad:

"Cuanto más conozco a la gente, más prefiero a mi perro"

Esta frase, aparentemente iniocente, a mi me parece muy triste por la facilidad con la que se rechaza a todo el género humanoide un plumazo. Sinceramente, me parece increible este grado de misantropia. Entiendo que muchas veces estas cosas se dicen a la ligera y sin pensar pofundamente en su significado, pero lo que veo es que además suelen ser objeto de alavanzas y aprobación con demasida ligereza, a mi entender. 

Es hoy el día en el que he tenido que leer, casi con incredulidad, como un conocido posteaba una foto en las redes donde se quejaba de que un perro había sido sacrificado por morder a una niña, mientras que un asesino de otra niña había salido de la carcel tras cumplir su condena. Es más, comentaba que por qué no cambiar la situación entre ambos. 

Pues bien, hasta cierto punto alarmado, he preguntado si a lo que se refería era a desear que el perro estuviera libre en vez de muerto o más bien era algún tipo de apología de la pena de muerte en nuestro sistema. Tiempo ha faltado para que otros contactos del susodicho me dijeran que los padres de niñas dormirían más tranquilos con este asesino muerto y enterrado.

Pues no, señor. No puedo estar más en contra. No deseo que ningún animal sea torturado, pero no puedo aceptar por esa misma razón que un ser humano sea ajusticiado con la pena capital como solución a nuestros problemas. Y es entonces cuando parezco un insensible radical que prefiere ver a un animal apaleado que aun ser humano apaleado. Al final he decidido pedir disculpas por ser humanista. Cuanto menos, curioso.

Tras todo esto no se exactamente que camino moral estamos tomando, si es que se toma realmente alguno en este mare magnum caótico y a veces amoral, pero no he podido evitar pensar en una distopía de mis favoritas: el extraño mundo de Philp K. Dick donde se preguntaba si los androides soñaban con ovejas eléctricas. si no lo conocen, recomiendo su lectura. Ha sido en un día como hoy donde he creido entender mucho de lo que allí dejó escrito y que en su momneto no llegué a apreciar.



viernes, 6 de septiembre de 2013

Los duelos de Caladan II

Tal y como venía siendo habitual, Al-Saif acudió temprano a las arenas de duelo, saludó a sus conocidos y se preparó para los combates. Esta era una ocasión especial por dos motivos, conocería por primera vez a la recién nacida hija de los duques, una niña vivaz que hacía la delicia de sus padres y que se presentaría por primera vez en este evento. Y por otra parte, estrenaría una impresionante espada regalada por el mismísimo duque a cambio de los servicios prestados a su casa. 

No obstante, el ambiente festivo se atenuó levemente por la presencia de un presuntuoso duelista semi-profesional venido de los círculos centrales del sistema, Nabuto Okami. No era mal luchador, pero mostraba una cierta arrogancia y falsa modestia muy común entre aquellos que son diestros en el arte de las armas. Una actitud que desagradaba a gran parte de los hombres de la casa del duque y a Al-Saif por igual. A pesar de esta eventualidad, la jornada se desarrollaba en un ambiente festivo y de sana competición como venía siendo habitual edición tras edición.

Fue curioso que Al-Said tardara en acomodarse al estilo de lucha local, carente de escudos, y que provocó que en algunos combates estuviera muy cerca de ser vencido. Esto se debía principalmente a que un luchador experimentado, acostumbrado a encontrarse con un escudo de fuerza, retenía la velocidad final del impacto a fin de poder atravesar dicho escudo, puesto que de lo contrario el escudo detendría el ataque. En un duelo sin escudos esto representaba una ligera desventaja, puesto que los luchadores locales no contaban con este retardo e inflingían sus impactos con cierta rapidez. Aún así, Al-Said supo imponerse a sus adversarios y llegar hasta las finales.

Así las cosas, a la semifinal llegaron, Al-Saif, como era habitual; Okami, a pesar de la animosidad de la mayor parte del público; un diestro guerrero de las estepas interiores, Alaster; y tras varios años sin participar, el mismísimo duque. La suerte hizo que Al-Saif y el duque se enfrentaran en la semifinal, quedando a su vez Okami y Alaster enfrentados. Fue entonces cuando uno de los lugartenientes de mayor confianza del duque se acercó a Al-Saif y le comentó casi en un susurro que nadie deseaba que Okami alcanzase el título en la categoría que se desarrollaba, más aún sabiendo que había conseguido el mejor palmares en las otras categorías ya disputadas haciendo gala de un retorcido sentido del honor que sólo los suyos laureaban.

Al-Saif calculó las posibilidades de que el duque pudiera vencer a Okami y pensó que desgraciadamente  le sería muy difícil. A pesar de su cercana relación con el duque, sabía que ese duelo no le sería fácil de superar. Así que hizo lo único que podría hacer, se enfrentó al duque con una ferocidad tal vez impropia de este tipo de duelos, dispuesto a terminar con Okami igualmente. Cambió su estilo, olvido la camaradería entre los duelistas en este tipo de eventos y luchó con la única intención de vencer, desatando un estilo mucho menos... delicado de lo que estaban acostumbrados a verle en Caladan. Luchó como el asesino que podía ser en otros momentos y otros lugares, cuando la etiqueta del duelo queda olvidada por la necesidad de supervivencia, cuando el único objetivo es destruir al adversario antes de que pueda siquiera pensar en atacarte.

Como era de esperar, ganó al duque y a Okami. Se hizo con el galardón, aumentando así su palmares y defendiendo una vez más el título de invicto en cada una de las ocasiones en las que había participado. Aún así, se sintió extraño, tal vez algo desprestigiado, pues obedeciendo las ordenes de su gran amigo el duque, había utilizado sus habilidades más letales en una arena de caballeros, un lugar tal vez impropio, tal vez no.





martes, 30 de julio de 2013

La gruta del lago Azul

Poco sabemos de estos niños excepto que les espera un prometedor futuro restaurando el poder de su antigua casa. Y en realidad, poco hay que saber, pues eran niños normales hasta el día en que se adentraron en la gruta del lago Azul. Pero no nos precipitemos y empecemos por el principio, que no es otro que el que presenta a unos niños curiosos que juegan a las princesas y caballeros en las ruinas de un antiguo palacio del imperio de los romanos. 

Aunque se trata de un lugar algo alejado del pueblo y está cerca del desolado poblado de los intocables, los apestados; o precisamente por ello, es su lugar predilecto para jugar. Como si se adentrasen en un mundo desconocido y peligroso, corretean por las ruinas, se acercan al poblado de pescadores intentando no ser vistos y huyen ante la presencia de cualquiera de sus andrajosos habitantes. Como niños normales, se divierten. 

Sin embargo, pese a sus juegos, estos niños son de noble cuna y su educación los orienta hacia grandes cosas, a ser señores de la tierra y las gentes, auinque esa tierra y esas gentes estén agotadas por las constantes guerras y ya poco quede de su pretérito esplendor. Así pues, en sus juegos de princesas y guerreros no solo imaginan vivire en un castillo, si no que piensan en lo que puede depararles su propio futuro.

Es en una de estas escapadas a jugar cerca del lago en la que descubrieron, tras investigar por los derruidos sótanos del antaño majestuoso palacio, una pequeño pasaje que se adentraba en las profundidades de la tierra y del que surgían sonidos como de agua corriendo, de risas y de brisas de verano. Asi encontraron la gruta del lago Azul.

sábado, 27 de julio de 2013

La casa del lago


Hubo en un tiempo una fuerte y noble casa cuyas tierras lindaban con un hermoso lago, un lugar apacible en tiempos de paz, pero convulso en tiempos de guerra debido a su estratégica posición. Se decía que este linaje venía de lejos, del antiguo imperio incluso. Siendo sus miembros conocidos en la región a pesar de no ser de las grandes casas gobernantes.

Pues bien, a pesar de su lejano origen, o tal vez precisamente por ello; esta casa fue perdiendo poder al ir dividiendo sus no demasiado extensas tierras entre sus miembros, lo que provocó que la grandeza sólo fuera un evocado recuerdo del pasado. Las mezquinas disputas entre parientes hicieron el resto, dejando a las tierras faltas de un gran señor que las gobernase. Una triste historia en verdad.

Sin embargo, un extraño acontecimiento pudo bien ser el origen de que esta noble casa recuperara su antiguo esplendor. Un acontecimiento del que unos simples niños son los protagonistas. Dos niños traviesos, curiosos de entre 8 y 13 años. Y para más señas, primos él y ella, ambos de esta gran casa y con ambos con una ambición acorde a su origen a pesar de su corta edad.

De momento no contaré más, tan sólo decir que esta niña será quien busque dar un heredero a esta casa que rivalice en poder con los más grandes señores, y que este niño curioso buscará un poder para sí que pocos hombres dominan, un gran poder velado para la mayoría, pero que también ayudará a forjar el destino de esta noble casa.
  

martes, 23 de julio de 2013

Los duelos de Caladan


A pesar de tratarse de una serie de duelos con armas negras entre luchadores no profesionales, Al-Saif acudía siempre que le era posible a los famosos duelos de Caladan. Años atrás había logrado fama y prestigio luchando en estos duelos. Sin embargo, ahora, endurecido en combates mucho más peligrosos, se le antojaban un divertimento más que un verdadero desafío. Aún así, principalmente debido a la estrecha relación con los señores de Caladan, solía acudir y participar en algunas de sus categorías, para disfrute de quienes lo veían combatir y desgracia de quienes debían enfrentarse a su esgrima.

Muchas veces se había dicho a sí mismo que no volvería a competir en estos duelos, precisamente por considerar que sus saberes lo situaban en una posición un tanto comprometida. Esto se debía a que, como es sabido, poco honroso es el enfrentamiento entre el maestro de un arte y practicantes noveles de la misma. No obstante, incitado por el señor de Caladan en persona, siempre acababa por lidiar en una de las varias categorías de estos duelos, haciéndose con el máximo galardón todas las ocasiones sin excepción. Al fin y al cabo, el buen ambiente solía ser suficiente para que esta circustancia no afectase al evento y que animase a los lugareños a mejorar año a año dispuestos a enfrentarse al imbatible Al-Saif.

Así pues, un año más acudió a Caladan dispuesto a disfrutar del ambiente festivo, visitar a sus señores y confraternizar con los luchadores que se acercaban de las más remotas regiones con motivo del evento.


lunes, 22 de julio de 2013

Caminar de nuevo entre las arenas del tiempo

Buf... ha pasado más de un año desde la última vez. Un año electrizante en cuanto a lo laboral, pero que se ha mantenido muerto en cuanto a lo creativo... habrá que retomar esta costumbre, aunque sea a golpe de voluntad y no de musas.

Aprovechando que hemos vuelto a pisar las arenas del sahel, volvamos también a sus hermanas del éter.

Así pués, resucitamos estas arenas resecas por el sol de la eternidad.