domingo, 17 de octubre de 2010

Dios, dioses.





ateo, a.

(Del lat. athĕus, y este del gr. ἄθεος).

1. adj. Que niega la existencia de Dios. Apl. a pers., u. t. c. s.

agnosticismo.

(De agnóstico).

1. m. Actitud filosófica que declara inaccesible al entendimiento humano todo conocimiento de lo divino y de lo que trasciende la experiencia. 

creyente.


1. adj. Que cree, especialmente el que profesa determinada fe religiosa. U. t. c. s.


Muchas definiciones son estas, pero estando en darles vueltas llegué a una conclusión, sin ser humano, no puede haber Dios. 


Tal y como ya escribí en otro momento, estimo que la religión es una forma de organizar unas creencias sobrenaturales que un hombre sabio o shaman de una de las primeras tribus humanas tubo a bien crear para dar una forma a todo aquello que escapa a la gran mayoría de los mortales. Esta idea que surgiría entre nuestros más primitivos ancestros bien pudo significar una herramienta positiva frente a la competencia con otras tribus que careciesen de ella. 

Y en ese mundo sobrenatural, no pudo por menos que aparecer uno o varios dioses, como voluntades de lo incognoscible. Así debió de comenzar la idea de Dios. Puesto que, ¿podría haber existido Dios antes de existir el ser humano?. Si se trata de una idea o "meme", no; puesto que no puede existir una idea sin mente o voluntad que la piense o exprese.

Supongo que hay quien pueda pensar que si la naturaleza de Dios es la de la ideas pensadas por el ser humano, Dios no existe, pero creo que en este argumento se peca de simplificar las cosas o de buscar demostrar la inexistencia de un Dios definido por algunas religiones. Además, no es esa mi intención.

Lo que es innegable es que lo que es pensado, una idea, existe como tal, a pesar de no ser tangible. Negar la existencia de todo cuanto no puede medirse o verse con los ojos sería negar demasiadas cosas de un plumazo, ¿o acaso alguien puede darme las coordenadas de sentimiento alguno?

Partiendo de la base de que existen los sentimientos, pues todos los hemos experimentado, a pesar de no haberlos medido, ¿Dios podría existir como un sentimiento más dentro de nuestra compleja naturaleza?

La mayor parte de los comportamientos humanos pueden ser explicados desde la etología más sencilla, puesto que seres naturales somos, a pesar del pensamiento de que nos alejamos de lo natural. Pero existen algunos comportamientos que trascienden nuestros instintos y no pueden ser explicados tan fácilmente, ¿o no? Tal vez sólo sean comportamientos complejos en apariencia, pero con una base natural difícil de apreciar.

Sea como fuere, la misma idea de Dios y el sentimiento religioso podrían ser entendidos como otros sentimientos inherentes al ser humano, como es el caso de los celos, el amor, la compasión, el arte o el nacionalismo; ideas a las que por otra parte nadie osa negarles la existencia. Entonces, ¿porqué se niega la existencia de Dios? Tal vez sea porque sus defensores no son capaces de aceptar las limitaciones de una idea, o porque sus detractores son incapaces de aceptar una idea que les es tan contraria. 

Así las cosas, ¿no puede existir Dios como un sentimiento humano, como el amor o el odio o el arte o el nacionalismo?





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